En las sociedades posmodernas, el casamiento muchas veces es visto de reojo y para algunas personas contraer matrimonio no es algo necesario o indispensable para su vida cotidiana. Por otro lado, sí existen personas que son un poco más tradicionalistas y que consideran un factor esencial para la pareja por creencias religiosas, románticas o porque consideran que el trámite legal será un beneficio en el futuro.
Aquellos que elijen casarse usualmente lo hacen entre los 25 y los 35 años. De hecho, muchas parejas que tienen una relación contraen matrimonio antes de lo previsto y el casamiento se transformó en una elección anticipada y que podría derivar en un divorcio temprano.
Dos científicos de la Universidad de Princeton, del Estado de New Jersey, de los Estados Unidos, Tom Griffiths y Brian Christians, desarrollaran una fórmula matemática que calcula la edad perfecta que tiene que tener una persona para contraer matrimonio. Ellos publicaron los resultados de la investigación en el libro "Algoritmos para vivir: la informática de las decisiones humanas".
Este estudio señala que la mejor edad para comprometerse y casarse es a los 26 años. Ellos, en el mencionado libro, explican que “una vez que se haya completado el 37 % del camino en un plazo determinado, es cuando se está en el punto exacto para tomar una decisión”.
Esta cita quiere decir que si una persona busca la pareja perfecta entre los 18 y los 40 años, a los 26 es cuando se produce la edad perfecta para casarse, porque se ha recorrido el 37 % de ese intervalo de tiempo. De esa forma, si es mayor o menor de 26 años existen grandes posibilidades de que la relación fracase.